Si el tema de Agile Coach está más candente que nunca, ¿qué tal si hablamos un poco sobre las diferencias y características de ser un Agile Coach interno o externo?

Algunos dicen que no hay diferencia. Respeto todas las opiniones, sin embargo, veo un número de ellos. Esto no quiere decir que crea que uno es mejor que el otro, simplemente veo algunas diferencias.

He visto interminables conferencias y debates de los defensores de los “internos” y los “externos”.

Prefiero dejar la batalla del bien contra el mal y promover una discusión sobre los desafíos que cada escenario puede traer para ti, Agile Coach, y las expectativas que se generan en torno al cambio que será impulsado por ti. ¿Hablemos más del tema?

AGILE COACH INTERNO E EXTERNO

Un Agile Coach interno podría ser alguien dentro de su organización que haya sido asignado a este nuevo rol.

Si tienes las habilidades necesarias, también puedes ser voluntario, ¿por qué no? Incluso puede ser alguien contratado para tal rol, pero el término “interno” sugiere a alguien que, de alguna manera, estará condicionado a las jerarquías y objetivos de ese entorno.

Otra característica que puede aparecer en este contexto es que el trabajo no puede ser temporal. Un agente interno también solo opera en una sola organización.

Hay quien dice que “un santo en casa no hace milagros”, pero los Agile Coaches internos suelen conocer a las personas que pueden apoyar y potenciar la transformación, saben con quién pueden contar y también con quién no.

También puede ser que ya hayan sido testigos de otras experiencias de cambio dentro de esa organización y esto puede ser un diferencial, ya que mínimamente pueden entender los factores de éxito y fracaso de esa otra transformación.

Todo este conjunto puede ser un atajo interesante. Además, por ser parte de la organización, suelen estar comprometidos con el cambio.

Es común que los agentes internos se enfrenten a problemas como la falta de tiempo para trabajar con los equipos, ya que en muchos casos continúan con otras asignaciones.

Es esa vieja historia de “rebanar” las horas de la gente y exigir rendimiento. ¿Funciona? Saca tus conclusiones.

De hecho, las personas y las organizaciones deben comenzar a ver a los empleados como agentes de cambio. Esto en sí mismo es un desafío inmenso que puede agravarse según su función actual.

Ser empoderado y ser visto como tal suele ser un buen paso hacia el éxito.

El miedo al fracaso y el compromiso directo con los objetivos también pueden ser una trampa para el trabajo del Agile Coach interno.

Cuando empoderamos a alguien para este rol interno, debe comprender que los experimentos y la tolerancia a fallas son una parte inherente de su trabajo. La presión de la dirección por los resultados y la ruptura de paradigmas acompañan a este gran desafío.

Por cierto, hablando de objetivos, la discusión se pone mucho más candente cuando se trata de medir el trabajo del Agile Coach, ya sea interno o externo. ¿Es posible hacer esto? Bueno, dejemos eso para otro post.

Volviendo al tema de este post, y ahora hablando del Agile Coach externo. Es un profesional contratado a través de un socio o proveedor para realizar un trabajo que normalmente es temporal.

Es alguien sin vínculo directo con la organización. Se espera que este profesional tenga experiencia y “rodaje” en otros ambientes, equipos y empresas, lo que puede aumentar su repertorio de herramientas para enfrentar resistencias, conflictos y nuevas prácticas.

La exención en este escenario no debe ser un obstáculo, pero debe usarse con discreción para que no se convierta en una falta de compromiso con el cambio organizacional.

Comprender el ritmo al que la organización responde a los cambios, acelerando y retrocediendo, probablemente serán puntos de atención a lo largo de la trayectoria de este profesional.

Por cierto, esto también es una preocupación de los Agile Coaches “internos”. Los Agentes de Cambio Interno a menudo son criticados por ser complacientes con el ritmo lento de la organización y por no desafiar con entusiasmo el “statu quo” de la empresa.

Todavía hablando del ritmo de la organización, es importante reforzar que esto se extiende a las personas y la cultura. Pasar por alto o descuidar estos puntos puede ser fatal para tu viaje.

Bueno, ya sabemos que el camino es largo y estar en la piel de un Agile Coach requiere de mucha disposición y energía para saber desenvolverse en diferentes entornos y desafíos.

Y, más que diferencias, depende de ti, Agile Coach, entender tus valores, limitaciones y comprometerte de verdad con el cambio.

Comprender estos puntos también debe ser motivo de atención para cualquier persona que elija a un profesional para desempeñar el papel de Agile Coach. De nada sirve simplemente designar o traer a alguien. Es necesario evaluar una serie de aspectos.

No podría terminar el post diciendo que, a pesar de los desafíos que puedan surgir para los Agile Coaches internos o externos, el objetivo final es el mismo: trabajar con una mentalidad ágil, tener mejores equipos, fomentar un entorno más innovador, hacer de la diversidad un aliado contra la monotonía, tener mejores productos, cosechar mejores resultados de forma sostenible, etc.

De todos modos, debemos preocuparnos por pasar por los desafíos, después de todo, todos estamos en el mismo barco.

¿Qué tal fomentar una Comunidad de Práctica de Agile Coaches dentro de tu organización para generar sinergia y apoyo entre todos? ¿O deberíamos alentar a las CoPs para los otros roles? Piénsalo 😉

Ahora estás más metido en el tema y cuéntanos, ¿cuáles fueron tus desafíos como Agile Coach interno o externo? ¡Disfruta y aprende más sobre nuestra capacitación de Agile Coaching Certification, que te brinda el conocimiento para viajar en diferentes roles!

Diego Bonilha

Sou instrutor oficial da ICAgile e SPC (SAFe Practice Consultant). Tenho experiência como desenvolvedor, líder, gerente de projetos e Scrum Master. Agilidade em escala e novos modelos de gestão em um mundo em constante evolução são assuntos que me fascinam e por isso busco. apoiar a mudança organizacional das grandes empresas em diferentes níveis

Leave a Reply

Se o tema Agile Coach anda mais aquecido do que nunca, que tal falarmos um pouco das diferenças e características de ser um Agile Coach interno ou externo?

Há quem diga que não tem diferença. Respeito todas as opiniões, porém, vejo uma série delas. Isso não significa que eu acredite que um é melhor do que o outro, eu simplesmente vejo algumas diferenças.

Já assisti palestras e discussões intermináveis dos defensores dos “internos” e dos “externos”.

Prefiro sair da batalha do bem contra o mal e promover uma discussão sobre os desafios que cada cenário pode trazer para você, Agile Coach, e as expectativas que são geradas em torno da mudança que será puxada por você. Vamos falar mais sobre o tema?

Agile Coach interno e externo

Um Agile Coach interno pode ser alguém de dentro de sua organização que foi destacado para este novo papel.

Se você reúne as competências necessárias você também pode se voluntariar, por que não? Pode até ser alguém contratado para tal papel, porém o termo “interno” sugere alguém que, de alguma forma, estará condicionado às hierarquias e metas daquele ambiente.

Outra característica que pode aparecer neste contexto é que o trabalho pode não ser temporário. Um agente interno também só atua em uma única organização.

Há quem diga que “santo de casa não faz milagre”, mas Agile Coaches internos normalmente conhecem as pessoas que podem apoiar e fortalecer a transformação, sabem com quem podem contar e também com quem não podem.

Agile Coach

Pode ser também que eles já tenham presenciado outras experiências de mudança dentro daquela organização e isso pode ser um diferencial, já que poderá minimamente entender os fatores de sucesso e fracasso daquela outra transformação.

Todo este conjunto pode ser um atalho interessante. Além disso, por fazerem parte da organização, normalmente estão comprometidos com a mudança.

É comum agentes internos enfrentarem problemas como falta de tempo para atuar com os times, já que em muitos casos continuam com outras atribuições.

É aquela velha história de “fatiar” as horas das pessoas e cobrar desempenho. Será que funciona? Tirem suas conclusões.

De fato, as pessoas e as próprias organizações precisam começar a enxergar os colaboradores como um agente de mudanças. Isto por si só já é um desafio imenso que pode ser agravado, dependendo do seu papel atual. 

Estar empoderado e ser visto como tal, normalmente, é um bom passo para o sucesso.

O medo da falha e o comprometimento direto com metas também podem ser uma armadilha para o trabalho do Agile Coach interno.

Quando empoderamos alguém para este papel interno é preciso entender que experimentos e tolerância às falhas são parte inerente ao seu trabalho. Pressão da gestão por resultados e a quebra de paradigmas vem de carona neste imenso desafio.

Aliás, falando em metas, a discussão fica muito mais quente quando se fala em medir o trabalho do Agile Coach, seja ele interno ou externo. Será que dá para fazer isso? Bom, vamos deixar isso para um outro post.

Voltando ao tema deste post, e falando agora do Agile Coach externo. Esse é aquele profissional contratado por meio de algum parceiro ou fornecedor para fazer um trabalho que normalmente tem caráter temporário.

É alguém sem vínculo direto com a organização. Espera-se deste profissional que ele tenha experiência e “rodagem” em outros ambientes, times e empresas, o que pode aumentar o seu repertório de ferramentas para lidar com resistências, conflitos e novas práticas.

Isenção neste cenário não deveria ser um obstáculo, porém deve ser usada com critério para que isso não se transforme em falta de comprometimento com a mudança organizacional.

Entender o ritmo que a organização responde às mudanças, acelerar e recuar, provavelmente, serão pontos de atenção durante toda a jornada deste profissional.

Aliás, esta é uma preocupação também dos Agile Coaches “internos”. Muitas vezes, Agentes de Mudanças internos são criticados por serem complacentes com o ritmo moroso da organização e por não desafiarem com entusiasmo o “status quo” da empresa.

Ainda falando sobre o ritmo da organização, é importante reforçar que isso se estende às pessoas e cultura. Passar por cima ou desprezar estes pontos pode ser fatal para a sua jornada.

Bom, já sabemos que a jornada é longa e estar na pele de um Agile Coach requer muita disposição e energia para saber lidar com diferentes ambientes e desafios.

E, mais do que diferenças, cabe a você, Agile Coach, entender seus valores, limitações e se comprometer genuinamente com a mudança.

Entender estes pontos também deve ser motivo de atenção para quem elege um profissional ao papel de Agile Coach. Não adianta simplesmente designar ou trazer alguém. É preciso avaliar uma série de aspectos.

Eu não poderia encerrar o post dizendo que, apesar dos desafios que podem surgir para Agile Coaches internos ou externos, o objetivo final é o mesmo: trabalhar a mentalidade ágil, ter melhores times, fomentar um ambiente mais inovador, fazer da diversidade uma aliada contra a mesmice, ter melhores produtos, colher melhores resultados de forma sustentável, etc.

Enfim, devemos nos preocupar em atravessar os desafios, afinal, estamos todos no mesmo barco.

Que tal fomentar uma Comunidade de Práticas de Agile Coaches dentro da sua organização para gerar sinergia e apoio entre todos? Ou será que só devemos estimular CoPs para os outros papéis? Pense nisso 😉

Agora você está mais por dentro do tema e nos diga, quais foram os seus desafios sendo um Agile Coach interno ou externo? Aproveite e saiba mais sobre nosso treinamento Agile Coaching Certification, que te dá conhecimento para trafegar em diversos papéis!

Diego Bonilha

Sou instrutor oficial da ICAgile e SPC (SAFe Practice Consultant). Tenho experiência como desenvolvedor, líder, gerente de projetos e Scrum Master. Agilidade em escala e novos modelos de gestão em um mundo em constante evolução são assuntos que me fascinam e por isso busco. apoiar a mudança organizacional das grandes empresas em diferentes níveis

Leave a Reply